Casta parasitaria • Castaparasitaria: 05/01/2009 - 06/01/2009

RAJOY COMPROMETE SU PRIMERA ENTREVISTA COMO PRESIDENTE
CON LA PERIODISTA MAGDALENA DEL AMO:
“ Cuando sea Presidente de Gobierno tendrá usted la primera entrevista como Presidente del Gobierno. ”
(16 de junio de 2005. Véase minuto 16:20 y ss. de la entrevista).

Páginas del Blog

31 de mayo de 2009

Ante el Ministerio de la Muerte (II)

-

-Por Roberto Malestar

(Véase «Ante el Ministerio de la Muerte (I)»)

Vengo definiendo el picaresco y esperpéntico Ministerio de “Igualdad” como un Ministerio que, en rigor, más lo es de la Muerte, la cual, por otra parte, constituye la Gran Igualadora: de pobres y ricos, de competentes e imbéciles, de víctimas y criminales, de Bibianas y Bibianos, de peperos y psoejonsianos, de gnósticos y agnósticos, de creyentes teos y ateos creyentes.

Pero también, y aunque en distinto giro no sin mayor firmeza, como «una institución estatal al servicio del crimen “democráticamente justificado”» quedó definido el prohijado Ministerio (del latín ministerium: servicio).

¿Servicio? Servicio de exequias regulador de recogidas asépticas de cadáveres de “los justos e inocentes”, tal como, con máximo cariño y respeto, se les nombraba antaño. Se trata de un nuevo “regulador” del mercado: del mercado de los traficantes de sangres inocentes, de los herodes y herodas de ese ombligo propio e insaciable que, sin vergüenza ni pudor, llaman “progresismo”; del hético mercado de los votos indiscriminados: el mercado de los traidores al juramento hipocrático y la exuberante indecencia profesional para quienes el sagrado ejercicio de la medicina representa y vale lo que el Nuevo Mundo representó y valió a la facinerosa marinería de Colón: ¡plata, plata, plata…, y plata nada más! Que «el verdadero amor se ahogó en la sopa; la panza es reina y el dinero Dios», según Discépolo.

Ese crimen sobre las personas más indefensas, sobre las personas aún nonatas, disminuidas y tasadas al nivel de la bellota y los alcornoques por el disparate de alguno de los “intelectuales” que vienen practicando, desde hace ya un buen puñado de quinquenios, la Ética con H aspirada; la Hética que se pronuncia “Jética”: la Hética como sórdida moral de los esfínteres.
Seguir leyendo...